No escribir en cursiva, ¿afecta el aprendizaje?

Texto: Pilar Melero de la Cámara

En plena expansión digital, cada vez más niños de cinco y seis años comienzan a escribir sus primeras palabras pulsando en forma mecánica las teclas de la computadora sin desarrollar la destreza de escribir de forma manuscrita.

No escribir en cursiva, ¿afecta el aprendizaje? / Foto: Thinkstock
No escribir en cursiva, ¿afecta el aprendizaje? / Foto: Thinkstock

El papel y el lápiz van siendo poco a poco sustituidos por procesadores de texto, laptops, y tabletas touch screen en muchos centros escolares. Así, muchos niños están creciendo sin tener que aprender la escritura manuscrita.

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En el caso de Estados Unidos, donde de acuerdo a los nuevos Estándares Estatales de Educación (Common Core State Standards, o CCSS, por sus siglas en inglés), el aprendizaje de la escritura cursiva ya no es obligatorio, según señala el diario The Washington Post, el número de niños y adolescentes capaces de leer y escribir en este estilo ha disminuido en los últimos años.

Tanto, que en la actualidad, según hace eco el portal de salud y tecnología Medical Daily, al menos siete de los 45 estados estadounidenses que han adoptado los estándares, están presionando para restablecer la cursiva como un pilar de la educación de los niños.

¿Tiene importancia? Las opiniones están divididas. De acuerdo con el portal antes mencionado, la escritura a mano aún se practica ampliamente en las escuelas en el estilo script, así que la controversia se centra en la escritura cursiva. Los defensores se basan en diversos estudios en los que se resaltan los beneficios de aprender a escribir en cursiva (sobre todo en los grados de primaria donde los estudiantes todavía están desarrollando su capacidad de lectura, escritura y las habilidades motoras).

Los críticos, por su parte, argumentan que el aprendizaje en cursiva es anticuado y que el tiempo que los alumnos tardan en escribir en manuscrito podría emplearse mejor en contenido educativo más rico.

“La cuestión clave no es si los niños necesitan saber cómo escribir en cursiva, sino que deben ser capaces de leer cursiva”, opina en entrevista para Yahoo Mujer Ann K. Dolin, fundadora y presidenta de la organización Educational Connections Tutoring and Test Prep en Fairfax, Virginia.

Según explica Dolin, “poder leer lo suficientemente bien en cursiva es importante, por ejemplo, en materias como Historia, cuando los niños están utilizando fuentes primarias para recopilar información”. Si uno quiere leer el documento original de la Declaración de la Independencia del país, debe saber leer un texto manuscrito, por ejemplo.

Otro temor tiene que ver con la seguridad. “Si uno no puede escribir en cursiva, ¿cómo hace para firmar un documento legal?”, se preguntaba hace unos meses Jean Leising, senadora republicana por Indiana, que introdujo el proyecto en ese estado, según recoge el portal de información Examiner.

Habilidades de lectura

Entre quienes consideran que la escuela debe conceder una mayor importancia a la enseñanza de la escritura en cursiva, el principal argumento son los numerosos beneficios en las conexiones neuronales encontrados en distintos estudios.

Un estudio dirigido en 2003 por dos investigadores franceses del Instituto de Neurociencias Cognitivas de la Méditerranée, encontró, por ejemplo, que cuando leemos letras que hemos aprendido escribiendo a mano se activan partes del cerebro diferentes a las que se activan cuando reconocemos letras aprendidas con un teclado, como se explica en Medical Daily.

Según revela este estudio, cuando escribimos a mano, los movimientos implicados dejan un recuerdo motor en la parte “sensorial-motora” del cerebro, que luego nos ayuda a reconocer las letras.

Esto indica que hay una conexión entre la lectura y la escritura, y sugiere que “el sistema sensoriomotor” influye en el proceso de reconocimiento visual durante la lectura.

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Por eso, a los niños que han aprendido a leer y escribir con un teclado les cuesta más reconocer las letras, sostiene la investigación.

Refuerzo de los procesos de aprendizaje

Otras de las ventajas para el cerebro de aprender a escribir a mano, según se explica en un artículo publicado por el diario The Wall Street Journal (WSJ) es que favorece el aprendizaje de formas, símbolos y lenguas, además de mantener la mente activa.

Las conclusiones se basan en estudio realizado en 2010 por la Universidad de Indiana y en el que, utilizando imágenes de resonancia magnética, se pudo comprobar como al escribir a mano se activan más regiones del cerebro, así como, la habilidad de expresar mejor pensamientos e ideas.

Además, el estudio encontró que las áreas del cerebro asociadas con el aprendizaje “iluminado” tenían mucho más actividad neuronal cuando los niños fueron invitados a escribir a mano palabras como “nave espacial”, por ejemplo. Las conexiones neuronales, por tanto, mejoraban al escribir.

El artículo del WSJ, titulado: Cómo escribir entrena al cerebro, cita a Virginia Berninger, una profesora de psicología educativa en la Universidad de Washington, que explica que los movimientos secuenciales de los dedos activan regiones masivas involucradas en el pensamiento, el lenguaje y la memoria.

De acuerdo con Berninger, “en los grados dos, cuatro y seis, los niños escriben más palabras, más rápido y expresan mejor las ideas cuando escriben ensayos a mano en comparación con escribir en un teclado”.

En conclusión, en un mundo cada vez más digitalizado, la batalla entre la caligrafía y el teclado aún no encuentra un vencedor claro en el ámbito educativo.

Entrevista con Ann K. Dolin, fundadora y presidenta de la organización Educational Connections Tutoring and Test Prep en Fairfax, Virginia. Fuentes adicionales: The Wall Street Journal (online.wsj.com), portal Medical Daily (medicaldaily.com), portal Examiner (examiner.com), The Washington Post (washingtonpost.com).